Somos como el Ying Yang...
Estamos tan cerca, pero a la vez tan lejos, yo como el blanco, blanco de inocencia, de pureza.
La dulce niña de mirada encantadora...
Tú! Tú eres el negro, la seducción, mí tentación, quién me llena
de pasión al sentir tú oscuro calor...
En blanco, en blanco vivo yo, manchada por tú roto corazón, tan
duro y frío como la nieve, la blanca nieve que cae bajo tus sucios pies.
En lo profundo del negro vives tú, con más de una y mil mujeres.
Eres el Yang, quien le tiene miedo a la soledad, y de lujuria llenas
tu ser, más no me puedes ver, siendo yo quien brilla
en ti, como la luna en las noches más oscuras.
Me clavas tú puñal en mi más sagrado lugar, acostumbrado ya estás.
Así que fui una más...
Más fui algo especial, pues tus ojos logre robar y lo que ninguna de tus otras
mujeres llegue a probar, la dulce esencia y sincera de tú corazón.
y así la vida nos unió, combinando nuestros dos colores
en un sólo ser, yo soy Ying quien robo el corazón del oscuro
Yang
Lindo, un abracito!
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